Historikerstreit
Había dejado pendiente desde hace unas semanas el referirme brevemente a la "Disputa de los historiadores"; o Historikerstreit, en alemán .
Cuando el historiador alemán Ernest Nolte en el año 1986 publicó en el periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung su pensamiento al respecto del surgimiento del nacionalsocialismo ,su desarrollo y acción en la primera mitad del siglo XX; tocó una de las fibras, sino la más, sensibles de la sociedad alemana.
Fundamentalmente porque apuntaba al nacionalsocialismo alemán como una respuesta defensiva al comunismo bolchevique soviético. Y que , por ejemplo, el Holocausto (no olvidemos que en Alemania negar el Holocausto es un delito) fue una reacción exagerada a lo que los comunistas soviéticos ya habían realizado y Hitler un exacerbado y deplorable radical, pero también en última instancia un defensor de Alemania ante la amenaza externa.
El planteo ya tenía algunos antecedentes, sobre todo si se rastrea en el historicismo alemán (Mommsen).
El historicismo trazaba la historia en forma determinista, dando por probado que hay leyes que se pueden descubrir y que rigen en el desarrollo de la historia.
Desde esta perspectiva, los conservadores propugnaban la tesis de un “ sonderweg ” o camino por el que se deslizaba la historia social alemana , donde el nazismo ocupaba el lugar de una anomalía extraña de la que eran responsables Hitler y su camarilla.
Paralelamente historiadores no alemanes como James Hoogan o Alan Taylor en la década del 60 abonaban teorías similares, proclamando un Hitler oportunista, que va construyendo su poder y tomando decisiones en base a errores y debilidades de la oposición y de los poderes europeos.
Al mismo tiempo encontrábamos que había otros historiadores como Hans Rosenberg o Eberhard Jäckel que seguían otras líneas historiográficas y que veían el surgimiento del nazismo y su apogeo como una consecuencia lógica e inevitable en la trayectoria de beligerancia, expansionismo y militarismo que se venía dando en Alemania desde la Prusia del 1700.
Historiadores como Andreas Hillgruber o Hildebrands, por su parte, rechazaban la propuesta de una Alemania nazi producto del mismo devenir político de su propia historia.
Ernest Nolte que había escrito en la década del 60 una obra titulada “Der Faschismu in seiner Epoche”, tratando al fascismo como un género de antimodernidad, de carácter negativo, abandonó sus teorías primigenias para enrolarse en este revisionismo del nacionalsocialismo como “Reaktion”.Su artículo “El pasado que no pasa” en el Frankfurter encendió el debate.
Esta disputa pronto trascendería los límites de los historiadores y sería social y político a la vez. El profesor y filósofo Jurgen Habermas lo enfrentó desde el pensamiento de la izquierda intelectual alemana.
La discusión fue pública, mediática y político-ética, pues divergía en dos vertientes, la primera era “la culpa alemana” y la segunda un renacer el nacionalismo alemán al tiempo que se compartía la carga de la responsabilidad, básicamente, con la aparición de la amenaza bolchevique.
Los interrogantes comenzaban a ser claros: ¿Había una continuidad y por lo tanto un desarrollo lógico y esperado en la historia alemana, conectando ese segmento de su historia , el nacionalsocialismo de la década del 30, con el militarismo , la identidad y la tradición prusiana? O ¿Era el nacionalsocialismo el producto de una serie de circunstancias externas, (para Nolte una reacción antibolchevique) que Hitler había utilizado oportunamente y por lo tanto excepcionalmente había aparecido en la historia? ¿Continuidad o ruptura? ¿Tenía Hitler un plan preconcebido con objetivos previamente (a la llegada al poder) definidos? ¿O simplemente era un prestidigitador intuitivo de las interacciones internacionales con la sociedad alemana? ¿Se puede historizar el Holocausto? ¿Es el Holocausto una singularidad?
Hay varios elementos de peso que es necesario, aunque sean contradictorios muchos de ellos, evaluar. Por ejemplo que, la “continuidad” era algo que el mismo Hitler afirmaba, pero serán los propios conservadores de estirpe prusiana quienes estarán más cerca de eliminarlo físicamente.
Considerar el aspecto racial del régimen, que lo llevará a extremos singulares de criminalidad dentro de la historia de la humanidad , que será algo propio del nacionalsocialismo y que ejerce por lo mismo de poderoso distintivo en la historia. Pero también habría que evaluar la densidad del antisemitismo social en Alemania de principios de siglo XX, su origen y su desarrollo.
Si el Holocausto no es historizable, desde el punto de vista de la comparación (nunca desde la relativización ); nos encontramos ante un fenómeno único, con responsables claros y también únicos.
Si lo situamos como un acontecimiento lamentable, tan lamentable como otros acaecidos a lo largo de la historia de la humanidad, sus responsables son tan culpables, como otros.
Por otro lado, si el nacionalsocialismo, sus hechos y consecuencias fueron un resultado esperable de la evolución de la historia alemana desde dos siglos antes; hay una indudable culpa que recae sobre el colectivo. Pero, si el régimen nazi fue producto de una serie de interacciones, internas y externas, donde la figura de Hitler emerge como elemento extraño a la historia alemana; y hay un factor disparador (por caso, la amenaza bolchevique); entonces el síndrome de la culpa, tiende a difuminarse en un contexto mucho mayor.
A modo de conclusión podemos decir que el debate es mucho más amplio de lo que aquí podemos abarcar y que estas son sólo aproximaciones a un tema especialmente complejo que envuelve a la sociedad alemana en la percepción de ese pasado, de su historia y de su tragedia.
Jurger Habermas hablaba de “conciencia histórica” , de uso público de la Historia; quizá allí radique su importancia, en lo determinante que es para las sociedades del hoy el poder pararse ante la historia propia del pasado más cercano, sin tabúes pero con la responsabilidad de saber, que ese pasado, para bien o para mal esta condicionando su presente y seguramente, marcará su futuro.
8 comentarios:
Excelente post como siempre!. Esta discusión me interesa mucho, no estarìa mal que si lo deseas le dedicaras varios posts, seguro que muchos también les interesa. Si puedes te agradecería que me mandaras o publicaras acá la bibliografía sobre esta discusión (¿Por qué surgió y se desarrolló el nacionalsocialismo en Alemania y en Occidente?). Es más, podríamos desarrollarla, yo he leído poco sobre este tema (Nolte, Arendt, Furet) a pesar del gran interés que tengo por el mismo; en agosto espero leer varios libros sobre el mismo; tu orientación sería de gran ayuda. Esta discusión va más allá de los historiadores alemanes, e incluye a otros pero que no son de origen alemán como el gran Fracois Furet, el cual - debes saber - desarrolló un intercambio epistolar con Nolte justo antes de morir en 1996, y que fue publicado en español por el Fondo de Cultura Económica (FCE) llamado “Fascismo y Comunismo”. (Es más dentro de poco se cumplen diez años desde que ese 11 de julio nos dejó Furet. Si tienes documentos en digital sobre el tema te agradezco si puedes enviármelos a mi correo.
Muchas gracias, esperando seguir con el intercambio, recibe un abrazo.
Profeballa
Nota: vi que “enlazaste” mi blog, muchas gracias, es un honor, pero preferiría (si te parece) que pusieras en el enlace “Venezuela y su historia” o algo parecido y no “profeballa”, pero es tu blog y lo respeto.
Hola Profeballa:
En verdad estoy siguiendo un plan de trabajo trazado previamente y que responde,primordialmente al libro que estoy preparando.
Este post, estaba pendiente desde cuando hablé de la memoria histórica en Alemania.Pero para sólo presentar adecuadamente lo que solicitas, necesitaría hacer una serie,como mínimo.Lo consideraré.Estoy de acuerdo,en que el tema es apasionante para cualquier historiador.
Igualmente podrías plantear tus interrogantes y de allí comenzar a intercambiar impresiones.
En cuanto a la bibliografía, te dejo una lista esencial, seguramente a muchos ya los has leido:
La Guerra Civil Europea (1917-1945).Ernest Nolte.México ,1994.
El fascismo y su época.Ernest Nolte.Madrid,1967.
Los Orígenes del Totalitarismo.Hanna Arendt. Madrid, 1978.
Eichmann en Jerusalén.Hanna Arendt.Barcelona,1999.
Los Verdugos Voluntarios de Hitler.Daniel Goldhagen. Madrid,1997
Los Orígenes de la 2° Guerra Mundial.Alan P Taylor.Munich,1980.
Hitler interpretationen (1923-1983).Gerhard Schreiber.Darmstadt,1988.
Memory,history and the extermination of the Jews of Europe.Indiana Univ. Press,1993.
La Guerra Forzada.David Hoogan.Tubingen,1961.
Permíteme una pregunta: ¿Lees en inglés? porque así se podría ampliar más.
Daniel Pisoni.
PD:Ya corregí tu enlace.Disculpa mi torpeza.
Enhorabuena por el artículo Daniel. Personalmente el surgimiento y conformación de los nacionalismos es un tema que me apasiona.
Con respecto al nacionalismo alemán, más que para dar una explicación en cuanto a su origen, para explicar su cenit con la formación del Partido Nacional Socialista de los Trabajadores como opción más poderosa, pondría como una de las causas principales las consecuencias mismas de la Paz de Versalles, cuyas humillantes cláusulas impuestas por los Aliados a una Alemania en ruinas y la explotación por parte del bando vencedor. Alemania quedó apartada del contexto internacional, con un gran endeudamiento provocado por las multas impuestas y con un gran malestar social que generó la polarización política y social en un cruce de acusaciones en medio de un precario régimen político. Sería esta situación que despertara el sentimiento de victimismo y/o de oposición al extranjero, propio de los nacionalismos.
La izquierda más dividida y con menos apoyos no triunfó en el Múnich de 1921, mientras que Hitler iba recogiendo bases y "montando" toda una estructura ideológico-política alimentándose y adaptando todos los factores de unión que tuvo a su alcance y enfrentándolos a cualquier otra alternativa. Y a partir de 1923 aún con su frustrado Putsch de Munich, comenzaría a recoger sus frutos.
Desde mi punto de vista, soy partidario de una visión continuista del proceso pero dejando clara la existencia de una radical transformación hacia la tendencia nacional-socialista del partido nazi con motivo de causas coyunturales cuyo origen ubicaría en Versalles.
Un saludo.
Víctor Vela
Estimado Víctor; en mi opinión el fenomeno Nazi va más allá del nacionalismo, ni siquiera puede ser reducido a una de sus características: el hipernacionalismo. Es como dices: algo más radical, algo novedoso, cuyos orígenes están en la reacción al mundo burgues, al rechazo al burgués, donde el judío es una de sus expresiones. Esta no es mi tesis, es la tesis de Francois Furet.
saludos
Efectivamente profeballa, el nazismo es algo bastante más complejo de lo que lo puede ser un nacionalismo, ya que su ideología supera con creces las fronteras entre las que se desarrolla. El ideario preconizado por los ideológos del nazismo es la expansión de la raza aria a todo el planeta.
Pero lo que he querido plantear es que, desde mi punto de vista, el nacionalismo alemán, más concretamente el que lleva al ascenso a Hitler, tiene un continuismo desde etapas anteriores que el nazismo lo transforma adaptándolo a sus intereses, y todo esto es propiciado como razón principal, desde mi punto de vista empero, por las causas coyunturales derivadas del desenlace de la Gran Guerra y la Paz de Versalles.
Gracias Víctor por tu visita y tu comentario.
Yo también soy de los que ven un continuismo en la historia alemana,que desemboca con Hitler en su realidad más cruda.
Pero en cuanto a la Paz de Versalles, si bien reconozco lo obvio; que fue un factor importante en el advenimiento de Hitler, me desmarco de los que afirman que por él,Hitler llega al poder.Diríamos que es un factor necesario,pero no suficiente.Las causas son más complejas.
Otros pueblos sufrieron vejaciones similares y no reaccionaron en esa forma.
Quizá pueda tratarlo en otro post.
Saludos.
Estamos de acuerdo Daniel!.
escríbeme para saber tu email. Por cierto de qué país eres? español? argentino?.
saludos
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